(16-04-2021, 02:00 PM)arcoiris escribió: Muy buena idea tener temas diferentes en este foro, en mi caso tuve muchas ganas de tener una relación estable con una niña trans, la verdad lo intenté con tres y no se pudo, pienso que eran jóvenes y no les atraía un veterano, no lo volví a intentar

Estimad@s muy buenas tardes.

Arcoiris y Paulett, mil y mil gracias por alimentar el foro.  Sus participaciones las he disfrutado mucho, ya que son sinceras, sin agresión y muy interesantes para leer.  A Paulett ya la conozco y veo que ha cambiado para bien, admiro eso. A arcoiris, no se si la conozco, pero se ha ganado mi admiración. 

Tener sexo con una mujer trans se vuelve una obsesión.  Concuerdo que puede ser más placentero que estar con una mujer biológica.  Es tal vez es la razón por la cual las buscamos.  

Creo que es el momento de desnudar un poco el alma:  tengo 45 años y he estado en dos ciclos grandes o periodos de conocer trans.   El último,  donde muchos me conocen como Ares, duro aproximadamente 15 años y terminó hace un poco más de 1.5 años, ultima vez que estuve con una mujer trans.  El primero,  casi no lo cuento, pero es hora. 

Conocí a mi primera mujer trans teniendo 18 años. Era estilista en un barrio de Medellín y tenía un negocio muy bien montado.   Siempre iba a ese lugar, así me tocará caminar 10 cuadras.  Fue un amor idílico de mi parte, ya que siempre he sufrido inseguridad por mi figura y a esa edad mucho más: obeso, nerd y pobre.   Era la época violenta de la ciudad y el dinero sobraba en las calles.  Ella (no voy a decir su nombre por respeto) era muy cotizada por su belleza y muchos "pillos" estuvieron entre sus sábanas.  Una vez le declaré mi amor y salí humillado de ese lugar por el rechazo y las burlas de quienes estaban en ese lugar. Además de haberle declarado mi amor a un "hombre" (entiendan que era joven) y sumado a la frustración de dudar de mi sexualidad fue un momento  complejo, además tengo un antecedente de depresión,  por lo cual no fue fácil.    Para rematar, le conté a mi madre, quien me entendió y "acepto mis inclinaciones" y "oró mucho para que me recomponiera" .  Reitero, no fue fácil para mí.  Me encerré en mis estudios, los cuales saque adelante. 

Una vez graduado, agarre el mundo  con las manos, ya que recién graduado tenía un trabajo muy bien pago, con poder, lejos de casa.  Como consecuencia me metí al alcohol y a la vida de gustos. 

Era el año 1999 y me encontraba en Uraba de rumba en rumba y de mujer en mujer.  Por el dinero y la imagen de poder, ya no importaba si era el gordo y así, las mujeres se me daban a cantidades.   No me importaban y estoy seguro que yo a ellas tampoco. 

Estando en Uraba, conocí a una niña trans (ubiquense lo difícil que pudiera ser esa época, en una sociedad machista , de dinero y mujeres faciles: una chica trans la tenía muy difícil, ya que era "distinta" y es más fácil  expulsar, rechazar  y denigrar de lo distinto).   En mis borracheras,  ella fue un objeto de mi deseo y no en pocas veces, mientras se mantuviera escondida la relación, todo estaba bien. No me interesaba que nadie se diera cuenta y la callaba con dinero.

Pero con los meses, me encontré con un gran ser humano, encerrada en un cuerpo equivocado y en una sociedad equivocada. Con sueños y sentimientos,  por lo que le agarré gran aprecio y  puedo decir que cariño. Era el año 2000, empezó a estudiar auxiliar de enfermería, pero la obligaron a volver a su rol masculino. Creo que debió ser muy duro para ella.  Continué ayudándola económicamente aunque ya solo de amigos.  Así tuviese esa figura delicada y un tanto femenina, ya para mí era un hombre y corte cualquier tipo de relación sexual.  

Todo cambio el día en que fue asesinada, no por ningún delito, solo por ser distinta.   Me sentí como un culo al ver que la vida no valía nada para muchos.  Así termino mi primer ciclo.

El segundo ciclo, ya con un poco de madurez,  estaba un tanto frustrado de mi matrimonio: una mujer plástica en una sociedad plástica.  Aprendí a las malas que el dinero no hace feliz a nadie, más cuando hay un tercero haciéndole el favor a mi ex...  en esa frustración volví a la peluquería aquella... muchas cosas habían cambiado: el sector no era tan violento,  ella no era tan joven, yo no era tan obeso, tenía carro... apariencia.  Esa vez se me insinuó fácil y fácil me metí con ella. Tal vez no se acordó de mí y no tenía porque hacerlo. Pero fue tan fácil estar con ella, verla sin ese aire de diva, donde ya había bajado su valoración,  que olvidé mi capricho de juventud y desde ese momento, inicié a pagar por sexo. 

Alcohol y gusto por el sexo: las conocí flacas, gordas, lindas, feas, blancas, negras... por mi trabajo viajaba mucho: conocí Santa Fe varias veces, barbacoas, el centro de Cali,  cerca a la plaza Garibaldi en el DF, Las Vegas...  creo que esos años me ayudaron a hacer parte de la fama que tengo.   Fueron años locos.

Puedo decir que tuve tres amores: todas iniciaron por sexo a cambio de dinero, y me volví cliente frecuente.  Comparti muchas horas con ellas y las conocí como personas. 

1. Con una de ellas salí hasta en en plan de novios: centro comercial, rumba,  paseo a San Andrés, a comer.. hasta le propuse que tuviéramos una relación seria pero con una condición, pero nunca dejó de ser scort y adicta al juego.  Si me hubiese dicho que si ¿ qué hubiese pasado?.   Con ella aprendí lo posesivas que pueden llegar a ser, pero también lo que es una muy buena amante.

2. La otra...Fueron tantas visitas, que ni recuerdo cuántas. Todo acabó con su viaje a Europa, donde aún reside.

3. Con la tercera fue una relación extraña. Igual siempre había pago por sexo y creí que teníamos algo especial, pero ella se retiró del mundo scort,  terminó de estudiar y hoy trabaja en una institución xxx.  Ella cortó todo contacto. Pero fue chévere.  Antes de la pandemia me la encontré de frente. Estoy seguro que me reconoció, la saludé y me ignoró.   No niego que me dolió. 

4. Una adicional: no digo el nombre porque es conocida: solo tengo que decir que es un gran ser humano y mucho. 

He estado sobrio varios años y con la sobriedad, ha bajado mi participación en la vida sexual paga.  Al principio del segundo ciclo,  estuve hasta con psicólogos ya que llegué a dudar de mi sexualidad, pero  aprendí (hace ya mucho rato) que no soy gay, y que me gusta en demasía las mujeres (como género). Es por ello que no tengo reparos de estar con una mujer trans y la trato como a cualquier persona y las reconozco por ello.  

Ya encontré a mi mujer ideal, quien es mi esposa y tengo una hermosa familia en crecimiento.  Pero es posible que vuelva a estar con una mujer trans, ya de manera más selectiva y  calmada...  aún me encantan y he aprendido a conocer y conciliar mis gustos y no me siento mal por ello.

Espero al menos haberlos entretenido.

Un abrazo

Ares

(16-04-2021, 11:20 PM)ares1975. escribió: Estimad@s muy buenas tardes.

Arcoiris y Paulett, mil y mil gracias por alimentar el foro.  Sus participaciones las he disfrutado mucho, ya que son sinceras, sin agresión y muy interesantes para leer.  A Paulett ya la conozco y veo que ha cambiado para bien, admiro eso. A arcoiris, no se si la conozco, pero se ha ganado mi admiración. 

Tener sexo con una mujer trans se vuelve una obsesión.  Concuerdo que puede ser más placentero que estar con una mujer biológica.  Es tal vez es la razón por la cual las buscamos.  

Creo que es el momento de desnudar un poco el alma:  tengo 45 años y he estado en dos ciclos grandes o periodos de conocer trans.   El último,  donde muchos me conocen como Ares, duro aproximadamente 15 años y terminó hace un poco más de 1.5 años, ultima vez que estuve con una mujer trans.  El primero,  casi no lo cuento, pero es hora. 

Conocí a mi primera mujer trans teniendo 18 años. Era estilista en un barrio de Medellín y tenía un negocio muy bien montado.   Siempre iba a ese lugar, así me tocará caminar 10 cuadras.  Fue un amor idílico de mi parte, ya que siempre he sufrido inseguridad por mi figura y a esa edad mucho más: obeso, nerd y pobre.   Era la época violenta de la ciudad y el dinero sobraba en las calles.  Ella (no voy a decir su nombre por respeto) era muy cotizada por su belleza y muchos "pillos" estuvieron entre sus sábanas.  Una vez le declaré mi amor y salí humillado de ese lugar por el rechazo y las burlas de quienes estaban en ese lugar. Además de haberle declarado mi amor a un "hombre" (entiendan que era joven) y sumado a la frustración de dudar de mi sexualidad fue un momento  complejo, además tengo un antecedente de depresión,  por lo cual no fue fácil.    Para rematar, le conté a mi madre, quien me entendió y "acepto mis inclinaciones" y "oró mucho para que me recomponiera" .  Reitero, no fue fácil para mí.  Me encerré en mis estudios, los cuales saque adelante. 

Una vez graduado, agarre el mundo  con las manos, ya que recién graduado tenía un trabajo muy bien pago, con poder, lejos de casa.  Como consecuencia me metí al alcohol y a la vida de gustos. 

Era el año 1999 y me encontraba en Uraba de rumba en rumba y de mujer en mujer.  Por el dinero y la imagen de poder, ya no importaba si era el gordo y así, las mujeres se me daban a cantidades.   No me importaban y estoy seguro que yo a ellas tampoco. 

Estando en Uraba, conocí a una niña trans (ubiquense lo difícil que pudiera ser esa época, en una sociedad machista , de dinero y mujeres faciles: una chica trans la tenía muy difícil, ya que era "distinta" y es más fácil  expulsar, rechazar  y denigrar de lo distinto).   En mis borracheras,  ella fue un objeto de mi deseo y no en pocas veces, mientras se mantuviera escondida la relación, todo estaba bien. No me interesaba que nadie se diera cuenta y la callaba con dinero.

Pero con los meses, me encontré con un gran ser humano, encerrada en un cuerpo equivocado y en una sociedad equivocada. Con sueños y sentimientos,  por lo que le agarré gran aprecio y  puedo decir que cariño. Era el año 2000, empezó a estudiar auxiliar de enfermería, pero la obligaron a volver a su rol masculino. Creo que debió ser muy duro para ella.  Continué ayudándola económicamente aunque ya solo de amigos.  Así tuviese esa figura delicada y un tanto femenina, ya para mí era un hombre y corte cualquier tipo de relación sexual.  

Todo cambio el día en que fue asesinada, no por ningún delito, solo por ser distinta.   Me sentí como un culo al ver que la vida no valía nada para muchos.  Así termino mi primer ciclo.

El segundo ciclo, ya con un poco de madurez,  estaba un tanto frustrado de mi matrimonio: una mujer plástica en una sociedad plástica.  Aprendí a las malas que el dinero no hace feliz a nadie, más cuando hay un tercero haciéndole el favor a mi ex...  en esa frustración volví a la peluquería aquella... muchas cosas habían cambiado: el sector no era tan violento,  ella no era tan joven, yo no era tan obeso, tenía carro... apariencia.  Esa vez se me insinuó fácil y fácil me metí con ella. Tal vez no se acordó de mí y no tenía porque hacerlo. Pero fue tan fácil estar con ella, verla sin ese aire de diva, donde ya había bajado su valoración,  que olvidé mi capricho de juventud y desde ese momento, inicié a pagar por sexo. 

Alcohol y gusto por el sexo: las conocí flacas, gordas, lindas, feas, blancas, negras... por mi trabajo viajaba mucho: conocí Santa Fe varias veces, barbacoas, el centro de Cali,  cerca a la plaza Garibaldi en el DF, Las Vegas...  creo que esos años me ayudaron a hacer parte de la fama que tengo.   Fueron años locos.

Puedo decir que tuve tres amores: todas iniciaron por sexo a cambio de dinero, y me volví cliente frecuente.  Comparti muchas horas con ellas y las conocí como personas. 

1. Con una de ellas salí hasta en en plan de novios: centro comercial, rumba,  paseo a San Andrés, a comer.. hasta le propuse que tuviéramos una relación seria pero con una condición, pero nunca dejó de ser scort y adicta al juego.  Si me hubiese dicho que si ¿ qué hubiese pasado?.   Con ella aprendí lo posesivas que pueden llegar a ser, pero también lo que es una muy buena amante.

2. La otra...Fueron tantas visitas, que ni recuerdo cuántas. Todo acabó con su viaje a Europa, donde aún reside.

3. Con la tercera fue una relación extraña. Igual siempre había pago por sexo y creí que teníamos algo especial, pero ella se retiró del mundo scort,  terminó de estudiar y hoy trabaja en una institución xxx.  Ella cortó todo contacto. Pero fue chévere.  Antes de la pandemia me la encontré de frente. Estoy seguro que me reconoció, la saludé y me ignoró.   No niego que me dolió. 

4. Una adicional: no digo el nombre porque es conocida: solo tengo que decir que es un gran ser humano y mucho. 

He estado sobrio varios años y con la sobriedad, ha bajado mi participación en la vida sexual paga.  Al principio del segundo ciclo,  estuve hasta con psicólogos ya que llegué a dudar de mi sexualidad, pero  aprendí (hace ya mucho rato) que no soy gay, y que me gusta en demasía las mujeres (como género). Es por ello que no tengo reparos de estar con una mujer trans y la trato como a cualquier persona y las reconozco por ello.  

Ya encontré a mi mujer ideal, quien es mi esposa y tengo una hermosa familia en crecimiento.  Pero es posible que vuelva a estar con una mujer trans, ya de manera más selectiva y  calmada...  aún me encantan y he aprendido a conocer y conciliar mis gustos y no me siento mal por ello.

Espero al menos haberlos entretenido.

Un abrazo

Ares

Sin palabras...

(16-04-2021, 11:20 PM)ares1975. escribió: Estimad@s muy buenas tardes.

Arcoiris y Paulett, mil y mil gracias por alimentar el foro.  Sus participaciones las he disfrutado mucho, ya que son sinceras, sin agresión y muy interesantes para leer.  A Paulett ya la conozco y veo que ha cambiado para bien, admiro eso. A arcoiris, no se si la conozco, pero se ha ganado mi admiración. 

Tener sexo con una mujer trans se vuelve una obsesión.  Concuerdo que puede ser más placentero que estar con una mujer biológica.  Es tal vez es la razón por la cual las buscamos.  

Creo que es el momento de desnudar un poco el alma:  tengo 45 años y he estado en dos ciclos grandes o periodos de conocer trans.   El último,  donde muchos me conocen como Ares, duro aproximadamente 15 años y terminó hace un poco más de 1.5 años, ultima vez que estuve con una mujer trans.  El primero,  casi no lo cuento, pero es hora. 

Conocí a mi primera mujer trans teniendo 18 años. Era estilista en un barrio de Medellín y tenía un negocio muy bien montado.   Siempre iba a ese lugar, así me tocará caminar 10 cuadras.  Fue un amor idílico de mi parte, ya que siempre he sufrido inseguridad por mi figura y a esa edad mucho más: obeso, nerd y pobre.   Era la época violenta de la ciudad y el dinero sobraba en las calles.  Ella (no voy a decir su nombre por respeto) era muy cotizada por su belleza y muchos "pillos" estuvieron entre sus sábanas.  Una vez le declaré mi amor y salí humillado de ese lugar por el rechazo y las burlas de quienes estaban en ese lugar. Además de haberle declarado mi amor a un "hombre" (entiendan que era joven) y sumado a la frustración de dudar de mi sexualidad fue un momento  complejo, además tengo un antecedente de depresión,  por lo cual no fue fácil.    Para rematar, le conté a mi madre, quien me entendió y "acepto mis inclinaciones" y "oró mucho para que me recomponiera" .  Reitero, no fue fácil para mí.  Me encerré en mis estudios, los cuales saque adelante. 

Una vez graduado, agarre el mundo  con las manos, ya que recién graduado tenía un trabajo muy bien pago, con poder, lejos de casa.  Como consecuencia me metí al alcohol y a la vida de gustos. 

Era el año 1999 y me encontraba en Uraba de rumba en rumba y de mujer en mujer.  Por el dinero y la imagen de poder, ya no importaba si era el gordo y así, las mujeres se me daban a cantidades.   No me importaban y estoy seguro que yo a ellas tampoco. 

Estando en Uraba, conocí a una niña trans (ubiquense lo difícil que pudiera ser esa época, en una sociedad machista , de dinero y mujeres faciles: una chica trans la tenía muy difícil, ya que era "distinta" y es más fácil  expulsar, rechazar  y denigrar de lo distinto).   En mis borracheras,  ella fue un objeto de mi deseo y no en pocas veces, mientras se mantuviera escondida la relación, todo estaba bien. No me interesaba que nadie se diera cuenta y la callaba con dinero.

Pero con los meses, me encontré con un gran ser humano, encerrada en un cuerpo equivocado y en una sociedad equivocada. Con sueños y sentimientos,  por lo que le agarré gran aprecio y  puedo decir que cariño. Era el año 2000, empezó a estudiar auxiliar de enfermería, pero la obligaron a volver a su rol masculino. Creo que debió ser muy duro para ella.  Continué ayudándola económicamente aunque ya solo de amigos.  Así tuviese esa figura delicada y un tanto femenina, ya para mí era un hombre y corte cualquier tipo de relación sexual.  

Todo cambio el día en que fue asesinada, no por ningún delito, solo por ser distinta.   Me sentí como un culo al ver que la vida no valía nada para muchos.  Así termino mi primer ciclo.

El segundo ciclo, ya con un poco de madurez,  estaba un tanto frustrado de mi matrimonio: una mujer plástica en una sociedad plástica.  Aprendí a las malas que el dinero no hace feliz a nadie, más cuando hay un tercero haciéndole el favor a mi ex...  en esa frustración volví a la peluquería aquella... muchas cosas habían cambiado: el sector no era tan violento,  ella no era tan joven, yo no era tan obeso, tenía carro... apariencia.  Esa vez se me insinuó fácil y fácil me metí con ella. Tal vez no se acordó de mí y no tenía porque hacerlo. Pero fue tan fácil estar con ella, verla sin ese aire de diva, donde ya había bajado su valoración,  que olvidé mi capricho de juventud y desde ese momento, inicié a pagar por sexo. 

Alcohol y gusto por el sexo: las conocí flacas, gordas, lindas, feas, blancas, negras... por mi trabajo viajaba mucho: conocí Santa Fe varias veces, barbacoas, el centro de Cali,  cerca a la plaza Garibaldi en el DF, Las Vegas...  creo que esos años me ayudaron a hacer parte de la fama que tengo.   Fueron años locos.

Puedo decir que tuve tres amores: todas iniciaron por sexo a cambio de dinero, y me volví cliente frecuente.  Comparti muchas horas con ellas y las conocí como personas. 

1. Con una de ellas salí hasta en en plan de novios: centro comercial, rumba,  paseo a San Andrés, a comer.. hasta le propuse que tuviéramos una relación seria pero con una condición, pero nunca dejó de ser scort y adicta al juego.  Si me hubiese dicho que si ¿ qué hubiese pasado?.   Con ella aprendí lo posesivas que pueden llegar a ser, pero también lo que es una muy buena amante.

2. La otra...Fueron tantas visitas, que ni recuerdo cuántas. Todo acabó con su viaje a Europa, donde aún reside.

3. Con la tercera fue una relación extraña. Igual siempre había pago por sexo y creí que teníamos algo especial, pero ella se retiró del mundo scort,  terminó de estudiar y hoy trabaja en una institución xxx.  Ella cortó todo contacto. Pero fue chévere.  Antes de la pandemia me la encontré de frente. Estoy seguro que me reconoció, la saludé y me ignoró.   No niego que me dolió. 

4. Una adicional: no digo el nombre porque es conocida: solo tengo que decir que es un gran ser humano y mucho. 

He estado sobrio varios años y con la sobriedad, ha bajado mi participación en la vida sexual paga.  Al principio del segundo ciclo,  estuve hasta con psicólogos ya que llegué a dudar de mi sexualidad, pero  aprendí (hace ya mucho rato) que no soy gay, y que me gusta en demasía las mujeres (como género). Es por ello que no tengo reparos de estar con una mujer trans y la trato como a cualquier persona y las reconozco por ello.  

Ya encontré a mi mujer ideal, quien es mi esposa y tengo una hermosa familia en crecimiento.  Pero es posible que vuelva a estar con una mujer trans, ya de manera más selectiva y  calmada...  aún me encantan y he aprendido a conocer y conciliar mis gustos y no me siento mal por ello.

Espero al menos haberlos entretenido.

Un abrazo

Ares

Estoy estudiando en estos momentos pero pare solo por leer esta expectacular historia, creo que ya as tenido un gran avance en el mundo de las trans y eso a forjado en ti lo que eres conoces muy bien este tema y opino que tu mayor labor en edte geupo es eso servir por. Medio del conocimiento que as adquirido a otros usuarios y tamboen a las niñas creeme que una persona intelectual e inteligente admiraria todo tu conocimiento aunq para otras sencillamente serias una sucia como se dice pero esas son mentes ignorantes a las cuales no hay que prestarle atención. 
Te felicito gracias y Dios bendiga tu hogar y tu familia exitos y triunfos un beso muaaa

La verdad no, la única que me ha dejado encoñado es Salomé Quintana, pero enamorado no, no he llegado a ese nivel todavía. Y la verdad es que aquí en Colombia aún hay mucho tabú con las trans. 

Recuerdo un día estaba con mis amigos en la calle y me voy encontrando a una trans con la que había tenido muchas experiencias y me hice el bobo y el que no la vió. Mis amigos la empezaron a mirar y ahí mismo esos comentarios todos transfobicos. Y yo, por temor al que dirán no dije nada ni reproches ni defendí, simplemente deje que pasará y yá.

Me sentí mal, y aún me sigo sintiendo mal. Esa chica quedó muy ardida y con toda la razón, jamás volví a saber de ella.

Mi relato es parece muy fantasioso pero es real 100%

Fue por allá en el 2014 yo tenía 24 recien cumplidos y algunos amigos fuimos a una discoteca, todo normal hasta ahí, la estabamos pasado chimba y mi instinto viril me impulsaba a buscar a ver que chica había por ahí para robarse. Bailando con varias chicas y sin concretar nada noté que una amiga llevó una prima, pero es muy calladita y muy seria, incluso un poco antipatica... Tratando de hablarle empezó a soltarse un poco más hasta que me aceptó una pieza de baile y sentí que hubo una buena conexción y pensé "aquí fue, hoy como cuquita". Entrando más en cofianza nos contamos cosas de la vida y le empecé a buscar el ladito como para robarle un beso o algo pero era muy esquiva y esa actitud más me motivaba ya que era una chiquitica de 1.60, cabello largo negro y de muy buena cintura. En fin ya entrados en un poco más de tragos  sentimos hambre y fuimos a buscar algo para comer y pensé "aquí aprobecho que estamos solos y le caigo más directamente" y así fue. Le dije que era una mamasita y que me encantaría besarla, ella se sorprendió y asintió con la cabeza pero me dijo " aquí no, vayamos una cuadra más" pensé que la conocian en el sector y depronto tenía novio o marido. En fin, fue uno de esos besos que te lo hacen parar de inmediato por esa mezcla de ternura, sensualidad y morbo. Mientras nos besabamos ella sonreia picaramente y pegaba más su cintura a la mia... De momento no quisimos volver al la discoteca y nos quedamos por ahí, caminado y besandonos cada vez más apasionadamente y con más toqueteos y morbo. Yo ya sentia Que tenia muchas ganas de comermela y de arrebato le dije "se deja robar o miedo?"  Ella se quedó pasmada  pero como que la calentura del momento le ganó  y aceptó. Tomamos un taxí y nos dirigimos a una zona de hoteles. Mientras charlabamos y nos besabamos noté cierta cara de procupación en ella, pero yo pensaba que depronto o le había comezado el periodo, o estába asustada porque tenía novio, en fin, no le paré bolas ya que yo iba a coronar esa chimbita. Entramos al cuarto del hotel y sacamos par cervezas las abrí le entregué una mientra la besaba por el cuello y le agarraba las nalgas... Empezamos a desnudarnos mientras nos besabamos, noté que su brasier tenia relleno (son de esos brasiers que tienen esa "almuadilla" para aumentar tamaño) pero a pesar de que sus senos no eran grandes eran muy ricos al acto y al chuparlos. Mientras ella seguía con esa cara de preocupación me quita el pantalon y me agarra el pene. Yo en varias ocaciones intenté agarrarle la entrepierna pero me esquibaba. Me senté en la cama y ella me da la espalda y que quita el pantalon. Tenia unos cacheteritos rosados hermosos. Y coji a piquearle esa nalga por todas partes. Ella se alejó de una manera abrupta y se quedó quieta por un momento dandome la espalda. Y me dijo "tengo mucho miedo" le respondí, "de que mi amor? Tiene novio? Mami tranquila que yo no le cuento a nadie... Ella respondió "ojalá fuera eso..." Ella se quedó callada como 1 minuto y dijo "ahhh ya que, que pase lo que tenga que pasar, eso me pasa por no ser sincera". Cuando se boltea y por debajo de ese hermoso cachetero rosado le noto un mediano bulto.... Señores y señoras ahí se me bajó todo... Por mi cabeza pasó de todo, me imaginé a todo el mundo señalandome, despreciandome, etc. Y ahí fue donde empecé a atar cabos y caí en cuenta de varios factores. Que su prima nos miraba y nos miraba, pero como una mira de estrañada, sobre todo hacia mi, un man que venia con ellos y que desde que nos empezó a ver más juntos, ya siempre se refiera en un tono burlezco y varias cosas que ahora no recuerdo. Entonces la miré a la cara y vi que estaba apunto de llorar y me dijo con una voz templosa "no me vaya a pegar ni hacer nada"... Le dije "no... Tanquila, más bien sientese aquí  en la cama y charlamos... Bueno me comentó que llevaba en transición desde los 15 años (ella en ese entonces tenía 21) me contó que tenía una vos tan delicada porque desde niño ta era muy afeminado y la voz casi no le engrosó, me contó que todas sus experiencias sexuales habian sido con amigos gays, que nunca había llegado tan lejos con un hetero, que por eso le pudo más el deseo que la razón (para ser sincera desde el principio). Ya a mi se me había bajado la prenda, y me imagino que a ella tambien. La verdad no le tenía ni rabia ni nada, aunque siempre tuve mucha aceptación con la personas lgbt, a partir de ahí le empecé a tener más empatía y a comprender mucho más. Nos quedamos callados un rato... Y por mi cabeza pasaban tanta cosas... Ya que a pesar de saber la verdad seguía sintiendo atraccion por ella, por otro lado empecé a dudar de mi sexualidad y me empecé a cuestionar si yo me estaba volviendo gay... En todas esas mientras ella miraba el televisor le agarré la cara y la besé… por qué lo hice? Ni idea, me entró el arrebato. Ella me devolvió el beso y sentí que el alma le volvió al cuerpo porque dejó de estar tan tensa, la miré a los ojos y le dije, "hoy será la primara vez para ambos". En fin Fue una de las mejores culiadas que me he pegado en la PUTA VIDA ya que en esa noche experiementé cosas que nunca había hecho con ninguna mujere. Ya para terminar con el relato, con la chica salí como 6 meses, íbamos a centros comerciales, ibamos a cines, restaurantes, eramos una especie de novios pero ninguno de los 2 dio el paso para oficializar la relación, en cuanto a mi mamá nunca supo que ella era trans y eso que amaneció varias veces en la casa, ellas hasta se llevaban bien. Yo  creo que ambos nos estabamos enamorando ya que pareciamos un par de adolescentes cada vez que nos veiamos y más y más veces la pasabamos juntos, nos celabamos, nos cuidabamos y preocupabamos mutuamente la mamá de ella se portaba muy bien con migo porque ella notaba que mis intenciones con su hija no eran solo sexo. Pero lamentablemente de un momento a otro ella cambio su actitud y me dijo que ya no queria que nos siguieramos viendo... Me dolió bastante pero lo acepté ya que ella si me había manifestado que tenía muchas metas, al cabo de unos años me enteré por un amigo de ella, que mi musa tomó esa decición porque se enamoró de mi y que tener una relación sentimental con alguien no le iba a permitir cumplir sus sueños. Así que me enteré que se había vuelto prepago pero casi no trabajaba aquí en Colombia, la pasaba más en México, Europa y el sur del continente.

Entonces yo creo que si me enamoré, quizas si yo hubiera tenido un poco más de caracter la historia habría sido diferente, pero bueno...

No he tenido ninguna novia trans, pero cada vez estoy más que convencido que es lo que necesito, o al menos alguna amiga con derechos. Yo soy más del tipo de persona que le gusta complacer al otro y obtiene placer haciéndolo, por lo que cada vez que pago por una trans y me preguntan qué me gusta les devuelvo la pregunta y ninguna me ha respondido bien, son tipo "lo que quieras o lo que sea, no sé"... por lo que he llegado a la conclusión que no me satisface tener relaciones con alguien que sinceramente no conozco, no sé qué es lo que le gusta, no sé qué hacer para calentarla, o cómo actuar. Igual por mi tipo de personalidad me es difícil congeniar al punto que quisiera con alguna, yo soy más bien de casa, no tan extrovertido, prefiero quedarme un fin de semana en casa jugando videojuegos o ver series que salir de farra o algo así, tampoco soy de drogarme, un man muy sano por así decirlo que también le gusta ejercitarse, y ese no es el perfil de hombre que la mayoría de trans del país buscan. Mi ideal siempre ha sido la trans reservada o hasta tímida, con gustos parecidos a los míos pero con tremenda sorpresa entre las piernas, algo así como la foto que tiene puesta la señorita arcoiris, pero eso se ve más que todo en países del primer mundo, por acá son muy escasas. Ya estoy planeando irme a vivir a algún país en Europa y ver si pruebo suerte por allá si no encuentro lo que busco aquí.

Cómo han estado tan participativos en este foro les voy contar la primera historia, está es más un desamor, está no es mía, es de una compañerita trans de vida.
 
Para que la historia no se me complique le vamos a poner nombre a esta marica (que tal si le ponemos Sara, o Valentina o Sofía…medio mundo trans en Colombia se llama así, hombre que culea con trans y no se ha comido una con una de este nombre…déjame decirte…no has culiado lo suficiente). Hablando en serio (y por petición de ella) la protagonista se llamará Catalina (machi que nombre tan pendejo…jajajaja mejor que el que tiene en su cédula el que le pusieron sus papás si es…jajajaja frescos ella está al lado mío y está cagada de la risa)
 
 
Catalina llevaba una relación de más de un año con su marido, según ella nos cuenta era un buen “tipo”, este “tipo” le daba regalos, el “tipo” le ayuda económicamente, con el “tipo” Culiaban rico y también se drogaban.
 
Catalina le presento a sus amig@s y parecía que a tod@s nos aceptaba y no nos juzgaba.
Catalina igual que casi todas las trans tiene que viajar por el país, para tener los ingresos para vivir, ayudar a su mamá, y los gustos que todos tenemos.
 
En uno de esos viajes, recibe un mensaje de una marica..machi perdóneme pero creo que estuve con su marido, usted sabe que yo la respeto amor pero el señor me escribió y lo atendí y nunca lo reconocí,cuando estaba saliendo del hotel, la piroba de…..pareció reconocer al “tipo” este, no estamos seguras pero prefiero amor decirle.
 
A Catalina se le bajó el mundo y le dijo que le mandara el pantallazo de la conversación, el teléfono ni la foto correspondian al de su pareja, le volvió el alma al cuerpo, pensando que este “tipo” no sería capaz.
 
De todas maneras hablo con la trans que pareciera que lo reconoció y como lo describió pareciera que si era.
Apresuró su viaje a su ciudad de origen ya que la duda que tenía con este “tipo” no las aguantaba mas. Entre todas organizamos un plan y se cuadro todo para que el “tipo”quedara en evidencia,  era tan buen plan para que Catalina no quedará como una loca celosa por si el “tipo” no era
 
Cuando el fue a visitarla, después de una señora culiada, Catalina le ofrece un porrito a este “tipo” cuando ya vio que estaba BN trabado, Catalina llama al número desconocido…y adivinen que celular empezó a sonar…pues si señores el celular doble SIM de este “tipo”.
 
No les voy a contar el show ni nada de eso…pero pueden imaginarselo, lo único que les cuento es, Catalina de un arrebato le saco un puñal y le obligó salir de su habitación y de su vida antes que ella le hiciera daño.
 
Se imaginan como paso ese man ese traba,
Finalmente entre todas lo boletiemos y nunca más se acercó a Catalina.
 
Nota. Favor cambien la palabra “tipo” por GONORREA…va a ser más entretenida.

Nunca descarté enamorarme de una mujer trans pero, sinceramente, rara vez una scort llamó mi atención en ese sentido y solo con ellas había tenido experiencias. Sin embargo, hace poco conocí a una mujer trans y quedé anonadado, y no solo por su belleza física (porque es hermosa), sino también por su personalidad: es tierna, buena amiga, sincera y tiene los sentimientos más lindos que he conocido. Lleva una vida lejos de los vicios y el sexo pago, es inteligente y detallista. Me siento afortunado por conocerla pero no puedo negar que me preocupa en cierta medida qué ñueda pensa mi círculo cercano, y no solo me preocupa cómo me sentiría yo, sino cómo se sentiría ella en ese caso. Además, hace poco terminé una relación y tampoco quisiera hacerle daño por inseguridades mías al respecto.